Bandas Armadas Atacan 2 Vehículos Blindados de la Embajada de EE.UU. en Haití
Dos vehículos blindados pertenecientes a la embajada de Estados Unidos en Haití fueron atacados a tiros por bandas armadas, sin que se reportaran heridos, informó este martes la embajada estadounidense.
De acuerdo con un comunicado enviado a EFE por la embajada, uno de los vehículos fue alcanzado por varios disparos el lunes.
«Afortunadamente, todo nuestro personal está seguro y no sufrió lesiones; nadie resultó herido en el incidente», declaró la embajada en la nota.
La representación diplomática también expresó su condena al aumento de la violencia de las bandas en Puerto Príncipe, y reiteró el llamado del subsecretario de Estado de EE.UU., Brian Nichols, a la unidad de Haití en la lucha internacional contra estos grupos armados.
En una publicación compartida en la cuenta de Facebook de la embajada, Estados Unidos condenó firmemente la violencia de las bandas en Puerto Príncipe, que buscan desestabilizar al gobierno haitiano.
El comunicado también destacó las operaciones conjuntas entre la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad y la Policía Nacional Haitiana (PNH), las cuales han logrado proteger a los residentes en varios barrios, repeler a las bandas, incautar armas y neutralizar a varios integrantes de estos grupos.
Estados Unidos reiteró su respaldo al pueblo haitiano, a la PNH y a la misión multinacional, reconociendo «los valientes esfuerzos de las fuerzas de Kenia, Jamaica, Belice y las Bahamas» para restaurar la seguridad en Haití.
«Quienes buscan desestabilizar Haití para su propio beneficio deberían preocuparse más por el bienestar del país y su población. Los responsables tendrán que rendir cuentas ante las autoridades haitianas e internacionales», afirmó la embajada.
El comunicado también subrayó que, tal como se discutió con el Consejo Presidencial de Transición y el primer ministro haitiano, Garry Conille, este es el momento de unir a la nación en la lucha contra las bandas, dejando de lado las disputas políticas.
Finalmente, la embajada reafirmó el apoyo de Estados Unidos a los esfuerzos del gabinete para avanzar en las prioridades del Consejo Presidencial, que debe guiar la transición hacia las elecciones previstas para 2025.
A pesar de la presencia de los primeros miembros de la misión multinacional, liderada por Kenia y respaldada por la ONU, la violencia en Haití continúa.
Según datos de la Oficina Integrada de las Naciones Unidas en Haití (BINUH), durante el primer semestre del año se registraron aproximadamente 3,900 víctimas entre muertos y heridos, tras un 2023 que finalizó con cerca de 8,000 víctimas.
El comunicado también resaltó que, en conversaciones recientes con el Consejo Presidencial de Transición y el primer ministro haitiano, Garry Conille, se reiteró la importancia de dejar a un lado las disputas políticas para unificar al país en la lucha contra las bandas armadas. La embajada subrayó que este es un momento crucial para la nación, con el objetivo de avanzar en la seguridad y estabilidad del país antes de las elecciones previstas para 2025.
Estados Unidos reafirmó su compromiso con el pueblo haitiano, apoyando tanto a la Policía Nacional Haitiana (PNH) como a la Misión Multinacional, que tiene el respaldo de la ONU y es liderada por Kenia. A pesar de estos esfuerzos, la embajada reconoció que la situación sigue siendo crítica, y llamó a la comunidad internacional a intensificar su colaboración para restaurar la paz y el orden en Haití.
La violencia, alimentada por las bandas que buscan desestabilizar al gobierno, ha causado estragos en la población civil. En muchos barrios de Puerto Príncipe, los residentes viven bajo la constante amenaza de los enfrentamientos armados, mientras los esfuerzos locales e internacionales continúan para proteger a los más vulnerables y restaurar el orden.
El apoyo internacional, con la colaboración de fuerzas de diversos países, es visto como un paso importante, pero la embajada de EE.UU. advirtió que el camino hacia una paz duradera en Haití requerirá una estrategia a largo plazo, en la que se combinen esfuerzos militares, diplomáticos y humanitarios.